LA FOTO DEL DIA. JIMENA DE LA FRONTERA

Debidamente equipado, el senderista piensa sobre las dificultades que tiene delante para continuar la ruta establecida. El senderismo es vocación nacida del contacto con la naturaleza viva que nos rodea. En Jimena tenemos montes para recorrer sin cansarnos durante toda una eternidad y eso es lo que siempre ha hecho este bohemio de nuestros campos, agarrado a la cola de un animal cargado, subía los "repechos" difíciles del terreno y pensaba al mismo tiempo en los "abatares" de la vida que le han convertido en fiolósofo y conocedor de nuestros caminos y "recovecos" de los montes.

Los montes y los campos, son las despensas de la naturaleza, me decía hace unos días sentado bajo la sombra de un algarrobo. Llévate siempre una "taleguilla" y cuando vuelvas a casa la traerás llena de membrillos, bellotas, nueces, castañas, setas, madroños... y un sin fin de plantas que te servirán de infusiones para remediar los dolores de la vida. Si te has cruzado con varios campesinos y has charlado con ellos, vendrás lleno de sabiduría, recien aprendida, que podrás compartir con los tuyos siempre.

Este senderista de la foto, aprendió el secreto y el conocer de los montes a fuerza de caminar entre chaparros y matorrales para llevar el "mendrugo" de pan a casa, porque él era " el relevo" del "Recovero de los montes" y de la sabiduría aprendida por el "trapicheo" de la existencia terrenal.

Hace también unos días, nuestro querido amigo Paco Vera, escribía con mucha sabidura sobre ese nuevo aprender a conocer y amar la naturaleza desde la más tierna infancia y apuntaba sobre "El Relevo" de esos niños que disfrutan delante de sus padres en esas preciosas rutas de senderismo como esta última de " Los Miradores de Jimena". Esos niños representan, como decia Paco, el verdadero relevo de un caminar por la naturaleza que sin duda alguna les hará ser más persona, amantes del medio rural y de la vida sana. El senderismo les ayudará sin duda alguna a ser generosos y a mirarse en el espejo de lo natural de la mano de sus propios padres.

Nuestro senderista aprendió por necesidad, pero hoy se siente contento del camino recorrido y como comenta a veces.... si volviese a nacer daría los mismos pasos por los mismos lugares de la mano "siempre" de aquel viejo amigo que fue mi "Abuelo".