Un Miercolero sin piñonate, es como un huevo sin sal ó un mollete sin manteca.Desde que se estableció para cierto sector de la población el Miércoles como jornada “sabática”, es decir “descansadora”… “ que no se pega golpe”… nos hemos dado cuenta que estamos en absoluta desventaja con el resto de los que descansan los sabaditos y los dominguitos….
Lo explico como puedo y el que quiera que me comprenda y el que no…. Que siga su camino porque nada le va a reportar el “comerse el coco” como mis locuras imaginativas.
Un miércoles… entre que te levantas, desayunas, haces lo primordial que no puedes dejar de hacer para otro día, recoges el desayuno, friegas, haces las camas, das el barrido, compras el periódico y te das cuentas que no tienes que trabajar, se te ha pasado casi la mañana……
Cuando te has olvidado del trabajo,y consigues reunirte con los amigos que miercolean como tú ya ha pasado más del medio día y sin querer pensarlo estás montado en el coche y regresando al punto de partida para contemplar por la ventanilla del coche… como se deslizan las gotas de agua por la cornamenta del venado de la rotonda que da acceso al pueblo y que está junto al instituto donde hay que recoger una pequeña parte de esa generación que será el futuro de nuestra continuidad en lo existencial.
¡Que el Miércoles, en definitiva comienza cuando estás comiendo a las cuatro de la tarde! Y al terminar con el corto-largo-pero negro. Apiñonatado ya no tienes miércoles porque Decathlón te espera para comprar lo que seguro te crees que necesitas aunque no lo necesites.
Si para colmo, a medio dia te has pasado más de la cuenta en lo refrente a la gastronomía pues resulta que no puedes cenar…. Y ahora es cuando no tienes miércoles ni para sonarte los mocos.
Ante ese razonamiento rocambolesco comprendemos que estamos en desventaja con los que disfrutan del descanso semanal en sabados y domingos. Creo que a partir del próximo miércoles, nos levantaremos cuando acabe el Martes y nos acostaremos en jornada contínua cuando empiece el Jueves y tal vez así podamos pensar que estamos recibiendo una jornada festiva mas acorde con lo que reciben los demás.
Con todo eso que os cuento a mi manera, este miércoles ha cundido porque hemos comprado el `periódico, le hemos puesto una pila al reloj, hemos tomado café, hemos visitado Jimena, hemos “empatado” a “cero a cero” en lo de Cuenca, se han sacado fotos del paseo, se ha regresado a Torreguadiaro y hasta hemos podido hacer una comida al día porque la cena ha sobrado para el próximo miércoles….! Ah y hemos montado una mesa camilla con corte de patas y todo…….! ¡ Que no hombre que ha habido mucho más y es que hasta hemos estado en el Decatlhón como siempre y hasta hemos comprado calcetines deportivos porque algo había que traer.
Al final pienso que tal vez el Miércoles no sea tan corto como lo pintan y no merezca la pena cambiarse al sábado y Domingo, así que continuaremos como estamos y a seguir trabajando hasta que algún día nos podamos jubilar y cantar eso de que por el mar corren… las liebres y por el monte las sardinas…..
Un abrazo del miercolero loco de remate….
Lo explico como puedo y el que quiera que me comprenda y el que no…. Que siga su camino porque nada le va a reportar el “comerse el coco” como mis locuras imaginativas.
Un miércoles… entre que te levantas, desayunas, haces lo primordial que no puedes dejar de hacer para otro día, recoges el desayuno, friegas, haces las camas, das el barrido, compras el periódico y te das cuentas que no tienes que trabajar, se te ha pasado casi la mañana……
Cuando te has olvidado del trabajo,y consigues reunirte con los amigos que miercolean como tú ya ha pasado más del medio día y sin querer pensarlo estás montado en el coche y regresando al punto de partida para contemplar por la ventanilla del coche… como se deslizan las gotas de agua por la cornamenta del venado de la rotonda que da acceso al pueblo y que está junto al instituto donde hay que recoger una pequeña parte de esa generación que será el futuro de nuestra continuidad en lo existencial.
¡Que el Miércoles, en definitiva comienza cuando estás comiendo a las cuatro de la tarde! Y al terminar con el corto-largo-pero negro. Apiñonatado ya no tienes miércoles porque Decathlón te espera para comprar lo que seguro te crees que necesitas aunque no lo necesites.
Si para colmo, a medio dia te has pasado más de la cuenta en lo refrente a la gastronomía pues resulta que no puedes cenar…. Y ahora es cuando no tienes miércoles ni para sonarte los mocos.
Ante ese razonamiento rocambolesco comprendemos que estamos en desventaja con los que disfrutan del descanso semanal en sabados y domingos. Creo que a partir del próximo miércoles, nos levantaremos cuando acabe el Martes y nos acostaremos en jornada contínua cuando empiece el Jueves y tal vez así podamos pensar que estamos recibiendo una jornada festiva mas acorde con lo que reciben los demás.
Con todo eso que os cuento a mi manera, este miércoles ha cundido porque hemos comprado el `periódico, le hemos puesto una pila al reloj, hemos tomado café, hemos visitado Jimena, hemos “empatado” a “cero a cero” en lo de Cuenca, se han sacado fotos del paseo, se ha regresado a Torreguadiaro y hasta hemos podido hacer una comida al día porque la cena ha sobrado para el próximo miércoles….! Ah y hemos montado una mesa camilla con corte de patas y todo…….! ¡ Que no hombre que ha habido mucho más y es que hasta hemos estado en el Decatlhón como siempre y hasta hemos comprado calcetines deportivos porque algo había que traer.
Al final pienso que tal vez el Miércoles no sea tan corto como lo pintan y no merezca la pena cambiarse al sábado y Domingo, así que continuaremos como estamos y a seguir trabajando hasta que algún día nos podamos jubilar y cantar eso de que por el mar corren… las liebres y por el monte las sardinas…..
Un abrazo del miercolero loco de remate….
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