NACIMIENTO JIMENATO. FOTOS: JUAN MANUELHoy tenemos un día bastante gris…nublado… oscuro…El agua no cesa de caer, todo el mundo nos sentimos contentos, incluso la “agachaiza” , “ la pipita”, las dos tórtolas”, “ los gorriones”,” los mirlos”, mi “ranita” y hasta esos “ loritos verdes” están graciosos metidos en los charcos que se hacen en la calle delante de mi ventana.
Ya estamos de lleno dentro del ambiente navideño y la verdad es que no me apetece hablaros de lo mismo y repetirme como el disco rayado que tengo guardado de La Piqué y que me da lástima de tirar a la basura por su valor sentimental.
Nuestra Navidad de siempre fue la de los borrachones, las comparsas navideñas, el guiso de carne de pavo, el frio que te calaba hasta los huesos, el agua que casi nunca dejaba de caer con fuerza, las piernas de las mujeres cuajadas de “cabrillas” a causa de la constancia en la “piconada” pero los chiquillos seguíamos en la calle correteando, mojándonos y soltando agua por todas partes como los pollos, al mismo tiempo que paseábamos nuestros “sabañones” en las orejas, las manos y los pies.
Desde mi ventana, observo como el agua se estrella con fuerza sobre las palmeras y chorrea por las puntas de las palmas. Lo que mas me llama la atención es un “Papá Noel” que cuelga de una ventana y el chorro de agua le sale por su parte trasera, presentando una imagen ridícula y grotesca a la vez.
Seguro que es más cómodo comprarse un “monigote colorao” de esos que venden en los grandes almacenes o traerse un árbol de Navidad de los prefabricados y un montón de bombillas enganchadas para poner la casa como un “Tiovivo” que, nada nos dice en nuestro interior sobre lo que son y deben ser estas fiestas para nosotros.
Todavía hay personas en Jimena, como existen en otros muchos lugares, que no renuncian a poner en su casa para sus hijos el tradicional “Portal de Belén”. Tienen tanto esmero y creatividad que no les importa recrearse en lo que hacen y reproducen las escenas típicas del “Nacimiento” que parece lo vuelves a vivir y al mismo tiempo le transmiten a sus hijos unos sentimientos fuertes para que el día de mañana continuen con lo que es nuestra tradición original de la Navidad.
Os dejo algunas fotos de un “Belén Jimenato” que para tener tiene hasta los chorizos y morcillas de la última matanza, pero lo que le hace resplandecer es el amor que ha puesto su creadora en el conjunto de la obra de arte.
¡Cantemos a la Navidad con “El Portal” nada más!.
Un abrazo.
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