"PARA UN DOLOR DE CABEZA"

Sin darnos cuenta,poco a poco, vamos cambiando nuestra forma habitual de pensar y proceder y aunque nos resistamos a cambiar,se nos ponen por delante nuestros hijos y nietos con sus nuevas fórmulas de afrontar la vida y que a nosotros no nos cuadran ,por muy razonables que nos las presenten.
El nuevo ritmo de vida es trepidante porque lo tienen todo y lo ansian todo sin límites y lo justifican de que están trabajando y como se gana se gasta,pero.. es que reflexiono y por otro lado veo a otra parte de la juventud,que no da golpe en una pelea y lleva la vida exactamente igual que los que se ganan el sustento con su trabajo porque no les falta el coche,comen de maravilla ,el culo aplastado de chatear y tienen la razón en siempre.
Dios me perdone,pero no estoy criticando,en mi BLOG sólo se permite reflexionar sobre la vida y es donde vuelvo a pensar en mis padres y abuelos que es el seno de mis raices. Por aquellos entonces amanecia el dia y con el amanecer estaba el trabajo y si faltaba el trabajo parecia que no amanecia(simplemente porque no podias comer). Se disfrutaba con cosas insignificantes para los "Colegas de hoy" como por ejemplo el que tu madre hiciese un arroz con carne o unas sardinas fritas y en otros aspectos el que llegase la feria y pudieras bailar con una chica bonita o...te comprasen unos zapatos nuevos (que se hacía de muy tarde en tarde).
Mis padres decian...hijo... no se puede gastar porque hay que tener siempre guardado "PARA UN DOLOR DE CABEZA" y eso me enseñó a disfrutar y a no desmesurarme en los gastos y con esa frase aprendí a ahorrar(para el dolor de cabeza) sin ser gorrón ni tacaño.
Me gustaria que la juventud reflexionase y aprendiese a ser feliz con lo que posee y lo que vaya necesitando y que lo superfluo lo valore y lo posea para el.. dolor de cabeza que no tiene que ser para gastarlo en enfermedades, sino en la educación de los hijos o para la propia autoestima ante grandes adversidades inesperadas.
Quizás mis lectores nunca hayan pensado en estas cosas pero nuestras raices nos enseñan muchísimo y eso si que es importante.