DE CHARLA CON SALVADOR CAVA........

EN EL APARTAMENTO DE MI HERMANO JOSE

Charlar un rato con Salvador Cava, representa para mi volver sin remisión alguna, a aquellos tiempos de mi juventud y explica las cosas con tanto énfasis que sin darte cuenta, te imaginas los personajes y vives las escenas tal como sucedieron, por lo que no tienes más remedio que pasártelo bien y hasta deseas que el rato de charla no se acabe nunca, por lo que cuando aparece alguien e interrumpe, a mi personalmente me da coraje, sin tener nadie la culpa.

Sin poder contener la risa ME CUENTA SALVADOR…. ¡ Frasquito..mira…!..¿ Te acuerdas de Frasquito Sánchez el de la barbería de frente a mi casa….? Y ante mi asentimiento afirmativo, continua….pues como tu sabes….Salvador Rocha y Frasquito Sánchez, llevaban un montón de años disgustados sin hablarse por aquello de la competencia por las barberías cerca y además que eran agentes comerciales y estas cosas les llevaron a no poderse ver ninguno de los dos. Continua Salvador muerto de risa….y dice otra vez….pues resulta.. que va Salvador Rocha por la Rambla de Barcelona y de pronto.. se encuentra frente a frente con Frasquito Sánchez y fue tan grande la alegría que sintieron, que se fueron el uno para el otro y se dieron un fuerte abrazo y estuvieron un rato llorando los dos como niños chicos olvidándose por completo de aquel odio que aparentemente habían vivido durante tantos años.

Esto que me ha contado, surgió porque hablamos de cuando iba él con su esposa paseando por Mérida y nos vimos de pronto sin esperarlo y la alegría que supuso para dos personas del mismo pueblo, el verse sin esperarlo después de mucho tiempo.

Me sigue contando……. Escucha Frasquito….era curioso tu primo Juan Estiraza…que siempre estaba pidiendo tabaco y yo le daba el cigarrito a cada instante porque como tu sabes siempre estaba recostado en su puerta sobre el quicio y como vivia enfrente a mi casa…..pues este Juan me decía… ha venido mi sobrino José….y me ha dado un paquete de cigarros, hay que ver lo que yo quiero a este sobrino mio y lo bueno que es pero a los quince o veinte días volvía a venir el sobrino y no le daba nada y me volvía a decir… Salvador… acaba de estar aquí mi sobrino y lo tonto y esaborio que es y a mi me entraba una risa que no podía aguantar porque Juan Estiraza estribaba la bondad o maldad de las personas en que le diesen o no algún que otro cigarrillo.

Salvador vivía en Mérida y poder hablar allí con alguna persona de Jimena, representaba para él casi una necesidad y me sigue contando….. mira… allí había una “tia” de cara regular…pero en cuanto la vi dije esta tía es de Jimena y vive aquí cerca, así que le dije….¿ Vd. es de Jimena verdad….? ¡ah de Jimena! ¡ Que pueblo más feo! Me contestó y yo para mis adentros dije….! Tú si que eres fea! ¡ peazo de fea! , ya la veo y casi no hablo con élla y cada día me parece la tía más fea. Yo cada vez que recuerdo estas cosas de Salvador me río sólo pues decirle a él que Jimena es feo es poco más que insultarle porque a mi me pasa otro tanto igual y le conté como vino una a mi oficina queriendo hablar con mi jefe y de momento la conocí y le dije….¿ Señora..Vd. es de Jimena….? Y me contestó …! Yo no tengo nada que ver con ese pueblo..! y me enfadé muchísimo porque yo estaba seguro que era del pueblo y además después hice averiguaciones y efectivamente era de Jimena familia de las “Peinetas”pero ella de seguro que perdió más que yo.,.. porque mi jefe el pobre siempre estaba ocupado y no podía atenderla.

Con Salvador, siempre se aprende algo y es que para mi los chumbos todos eran iguales y él me explica que “nanay de las coles” que los mejores son “los coloraitos” y que los blancos no le gustan, así que vamos a tener que exterminar a todos los extranjeros del Puerto Moral y volver a plantar chumberas de los “coloraitos” ya que cuando “palmemos! ó “larguemos la traba” si en el Cielo está el Puerto Moral sólo con chumbos blancos, no sé que es lo que vamos a hacer allí si los blancos no nos gustan.

Espero poder encontrarme otro día con Salvador y a lo mejor tenemos la suerte de recordar estas cosillas que tanto nos alegra la vida y que nos hace sentirnos orgullosos de haber nacido en Jimena de la Frontera y yo que me he criado entre el “Caño la Tronereta” y el “Barranco Melgar”..

Un abrazo Curro.