EL SANTUARIO DE DOÑA MANOLITA EN MADRID
Hace unos días estuve en Madrid con mi amigo Pepe el Tasca y lo disfrutamos bastante bien con nuestras respectivas esposas y dentro del poco tiempo que estuvimos allí, pasamos varias veces junto a una gran cola de personas que bastante serios hacían muy bien su papel de esperar y esperar a que aquello avanzase pasito a pasito.
Yo como suelo ser un poco atolondrado, la primera vez creí que se trataba de un cine o teatro pero fue mi amigo Pepe el que me lo aclaró diciéndome que aquello era el Santuario de Doña Manolita, donde la gente se pone en la cola para rezar y cuando llegan al altar, entregan dinero en las ventanillas para que en Navidad sus oraciones sean oidas y los justificantes que les entregan puedan ser canjeados por más dinero. Yo creo que me engañó porque no me dijo la letra pequeñita y es que puede tocarte o no puede tocarte, pero a pesar de todo al día siguiente, nada más desayunar, me dice Pepe, vamos a rezar un poquito en el Santuario de Doña Manolita, así que nos pusimos en la cola y allí se ven cosas sorprendentes como por ejemplo habia un señor que llevaba un calcetín rojo y otro negro porque esto le produce suerte, otro señor llevaba el ojo izquierdo cerrado y pensé…..será tuerto….. pues no pues decía que si llevaba un ojo cerrado la suerte de que le tocase era seguro, otros pasaban los números adquiridos por las critaleras del establecimiento y hasta había un jorobado que cobraba una propina para que le pasasen el décimo por su jorobeta. Pero Pepe que ya sabe de estas cosas, me dijo Paco lo mejor es que cuando estemos en las ventanillas, nos mantengamos de una sola pierna a la pata coja y como así lo hicimos yo estoy seguro que el 22 de Diciembre seremos ricos, si a mi hermano José no se le ocurre decir………! To…eso….es….panáaaaaa! y nos mete el mal “fario”.
Bueno ya lo sabeis, en vuestras visitas a Madrid no olvideis de visitar el Santuario de Doña Manolita en la Gran Via Madrileña y os quitareis de trabajar seguro.
Hace unos días estuve en Madrid con mi amigo Pepe el Tasca y lo disfrutamos bastante bien con nuestras respectivas esposas y dentro del poco tiempo que estuvimos allí, pasamos varias veces junto a una gran cola de personas que bastante serios hacían muy bien su papel de esperar y esperar a que aquello avanzase pasito a pasito.
Yo como suelo ser un poco atolondrado, la primera vez creí que se trataba de un cine o teatro pero fue mi amigo Pepe el que me lo aclaró diciéndome que aquello era el Santuario de Doña Manolita, donde la gente se pone en la cola para rezar y cuando llegan al altar, entregan dinero en las ventanillas para que en Navidad sus oraciones sean oidas y los justificantes que les entregan puedan ser canjeados por más dinero. Yo creo que me engañó porque no me dijo la letra pequeñita y es que puede tocarte o no puede tocarte, pero a pesar de todo al día siguiente, nada más desayunar, me dice Pepe, vamos a rezar un poquito en el Santuario de Doña Manolita, así que nos pusimos en la cola y allí se ven cosas sorprendentes como por ejemplo habia un señor que llevaba un calcetín rojo y otro negro porque esto le produce suerte, otro señor llevaba el ojo izquierdo cerrado y pensé…..será tuerto….. pues no pues decía que si llevaba un ojo cerrado la suerte de que le tocase era seguro, otros pasaban los números adquiridos por las critaleras del establecimiento y hasta había un jorobado que cobraba una propina para que le pasasen el décimo por su jorobeta. Pero Pepe que ya sabe de estas cosas, me dijo Paco lo mejor es que cuando estemos en las ventanillas, nos mantengamos de una sola pierna a la pata coja y como así lo hicimos yo estoy seguro que el 22 de Diciembre seremos ricos, si a mi hermano José no se le ocurre decir………! To…eso….es….panáaaaaa! y nos mete el mal “fario”.
Bueno ya lo sabeis, en vuestras visitas a Madrid no olvideis de visitar el Santuario de Doña Manolita en la Gran Via Madrileña y os quitareis de trabajar seguro.
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