! CHUZOS DE PUNTA !

Parece que estoy oyendo detrás mía, la voz de mi padre diciéndome…..! no salgas a la calle porque están cayendo chuzos de punta!......

Por mucho que he buscado y rebuscado en el diccionario, no aparece esta palabrita, por lo que espero que algún día, alguien se digne incluirla en ese hipotético diccionario jimenato que yo creia que estaba medio realizado pero quizás se trate de una acumulación de palabras amontonadas sin orden ni concierto a la espera de que un virtuoso pueda convertir el milagro en realidad.

La palabra en sí, se las trae, porque a mi siempre se me ha representado como oscura, fea y hasta sin sentido o con un sentido que me producía miedo y temor a los fenómenos meteorológicos invernales de la naturaleza.

Bueno, pues buscando el concepto real de la frase, llego a la conclusión de que el verdadero sentido es … que no debía salir a la calle porque estaba lloviendo intensamente. Pero mi mente y seguro que la de algunos más, siempre le pone mas cosas detrás a este sentido verdadero como por ejemplo el que estaban cayendo además de la lluvia,….. los rayos, los truenos y todos … de punta….que es peor todavía.

Estamos a quince de Noviembre, luce un Sol espléndido, temperatura de 20 grados y la gente atrevida la veo todos los días metida en el agua de la playa como si estuviésemos en el mes de Agosto, lo que de verdad resultará para muchos muy agradable porque además siguen conservando su piel morena.

Para mi que voy a Jimena todas las semanas y observo el campo hasta cansarme de mirarlo y remiralo todo, me doy cuenta que la tierra de labor está reseca como una mojama y pidiendo agua a gritos, representando una ruina para agricultores y ganaderos que tienen que estar suministrando piensos a todos sus animales con el elevado precio que están alcanzando los cereales que sirven de base a estos piensos.

Queridos amigos, en verdad os digo que desde hace un tiempo para acá las palabras ¡chuzos de punta! Ya me suenan como una bonita melodía y ojalá las oyese hoy mismo y continuase oyéndolas un par de meses seguidos hasta ver los campos de mi pueblo llenitos de “yerba”, las setas tiernas y frondosas, las targarninas verdes y grandes sin miedo a crecer y el corazón de los agricultores y ganaderos rebosantes de alegría.
Sólo me queda añadir a los queridos jimenatos que no olviden jamás esta palabra y que la conserven en nuestro argó lingüístico , haber si de esta forma conseguimos que pronto llueva a gua y no café en nuestros campos.

Un fuerte abrazo a todos. Currini