jueves, marzo 11, 2010

"EL RIQUITRÚN". JIMENA DE LA FRONTERA

ZONA DEL RIQUITRÚN. FOTO: JUAN MANUEL
Para los jimenatos de ahora probablemente no les dirá absolutamente nada la palabra “riquitrún” y si la buscan en el diccionario se darán con un canto en los dientes porque tampoco la encontrarán ya que según estos “manuseados” libros la palabra en sí no existe.

Como somos tan dados a investigar por nuestra cuenta de seguro que buscaremos en el Google y allí si que encontraremos algo relacionado con nuestra palabrita en cuestión pero que nada tiene que ver con el significado que los jimenatos le hemos dado pues los “ayamontinos” presumen de que la palabra es de ellos y que “riquitrún” es una especie de panecillo fabricado en Ayamonte desde hace mucho tiempo.

Para poder hablar del “riquitrún” ahora hay que preguntar a los padres y en muchos casos a los abuelos ó bisabuelos y algunos hasta os contarán la historia de un triste suceso acaecido en nuestro Jimena hace ya muchísimos años, que no puedo encasillar en la cronología porque no soy partidario de ella como elemento primordial de la escritura.( Si preguntais a nuestro querido Juan León Espinosa lo encuadrará todo perfectamente en un marco cronológico de fecha con horas, minutos y segundos, pero eso es un don que él posee en exclusiva).

Para nosotros el “riquitrún” era un artilugio de fabricación casera que consistia en medio bidón de los antiguos de latón al que se le hacía unos agujeros por donde se pasaban unas “maromas” y con el acople de unas “carruchas” corria por las “maromas” cuando desde dentro una persona tiraba con fuerza y avanzaba.

A cada lado del río Hozgarganta había dos árboles a los que se ataban las “maromas” por donde el riquitrún circulaba para pasar el río.

Yo tendría aproximadamente unos siete u ocho años cuando uno de esos inviernos crudos de intensas lluvias, como el que atravesamos, ocurrió el suceso que entristeció el pueblo durante bastante tiempo.

Un joven que de unos veintitantos años se había puesto su capote de agua y había ido a dar una vuelta a sus vacas que tenía por la zona de Las Asomaillas. En medio del temporal cuando más agua llevaba el Hozgarganta decidió utilizar el “riquitrún” para pasar el río con tan mala fortuna que la fuerza y la altura del agua lo alcanzaron y lo hicieron desaparecer.

Los chiquillos sufriamos con estas cosas tristes que acontecian y veiamos las salidas de cuadrillas y cuadrillas de gente del pueblo con su bestias recorriendo todo el rio durante muchos días de intensas lluvias,sin resultados algunos, hasta que por fin encontraron el cuerpo enterrado en las arenas que se formaban por la parte de “La Tosca”.

El riquitrún, gracias a Dios que desapareció como artilugio para atravesar el río pero hoy Juan Manuel me ha enviado esa foto donde podreis apreciar un pequeño poste donde un poco más arriba estaba amarrado el “riquitrún” a los dos árboles, siendo en definitiva lo que me ha obligado a explicar un poco a mi manera lo que era el riquitrún y para que se utilizaba.

Me queda la incógnita de saber cual es la raiz etimológica de la palabrita en cuestión y que tal vez alguien de mi edad pueda descifrarla aportando alguna novedad, aunque al haber desaparecido el riquitrún, se perderá para siempre por desuso.

Un abrazo.

4 comentarios:

pacovera dijo...

Amigo Currini: Le he comentado a mi padre lo del riquitrún. Resulta que en S. Pablo, en las cercanías del actual puente sobre el Guadiaro, existía una barca que realizaba la función de pasar a la gente de una orilla a otra. La regentaba Gabriel Delgado. En cada orilla había un tronco. Se unían mediante maromas. El precio de paso era de dos reales. Él esperaba, entre las cañas y tarajes,un poco escondido,a que hubieran varios usuarios. Acudía a la voz de: ¡barqueroooo, eche usted la barcaaaa!
Resulta, que un hortelano vecino estaba disgustado con Gabriel y construyó un riquitrún para ser utilizado por él y su familia. Estaba construido con un cajón, en este caso de madera. Utilizaba también maromas y carruchas.

La historia de mi padre termina con una cancioncilla que dice así:

"Dos cosas tiene San Pablo que no las tiene MADRID: La barca y el riquitrún caminito de Gaucín"

Un abrazo de Paco Vera

susipedrolu dijo...

Hola Currini, soy Pedro Sánchez Moreno, hijo de Pedro Sánchez Mostazo, preguntado este último, así a bocajarro, sobre el riquitrún, me ha detallado sin dudar todo lo que aquí describes, pero no ha sido capaz de recordar nada acerca de la raiz etimologica, lo que si que le ha emocionado a sido oirme decirle que estas preguntas se las hacia en realidad un tal Currini.
Muchos abrazos, recuerdos, y todo el lote completo...
Espero completar vuestro contacto a través de este blog.
Yo conocía tu apodo porque co-protagonizas muchas de las historias que me cuenta mi padre de su juventud.
Un fuerte abrazo.

Currini dijo...

Hola Pedro Sánchez Moreno: Estoy convencido de que tu padre conoce perfectamente todo lo referente al riquitrún. A tu primer comentario ya te contesté donde mismo escribistes e hiciste el descubrimiento de mi blog. Sobre tu padre, en mis escritos, he comentado muchas cosas porque realmente fuimos verdaderos amigos y compañeros de estudios. Nos fumamos muchos cigarros celtas juntos y compartiamos las dificultades que habia para adquirir los cigarrillos porque dinero es que no habia en casi ninguna casa del pueblo.
mi correo: currinijimenez@gmail.com a través de él me puedes facilitar el tuyo y entraremos en contacto,. Así podré contarte muchas cosas que recuerdo de las vivencias con tu padre. Dile que Bartolo Barranco Benitez ( estuvo en vuestra casa en Barcelona viviendo creo) ha estado enfermo pero ya está recuperado y bastante bien por cierto. Ahora vivo enTORREGUADIARO que es una barriada de San Roque y estoy Jubilado habiendo sido mi último trabajo en la Agencia Tributaria( Administraci´ón de Aduanas del Puerto de Algeciras).
Aquí seria imposible contaros tantas y tantas cosas pero por el correo será más fácil.
Un abrazo a ti y a tu padre de Currini

Currini dijo...

Amigo Paco:Veo que tu padre sabe mucho más que yo de "riquitrunes" pues esa historia de Gabriel Delgado no la sabia y me ha hecho mucha gracia. Me hace pensar que la barca a la que alude tu padre es la de La Barca Moreno pues conocí a un Gabriel Delgado muy mayor que después vivió en Marchenilla y la canción desde luego tiene "arte", eso se cantaba en los carnavales.
Cuentale a Don José esto:
En la Estación de JIMENA HABIA UNA TIENDA PROPIEDAD DE JOSÉ COBALEA RAMOS., ESTABA EN LA MISMA CARRETERA. JOSÉ COBALEA DABA "FIAO" EN SU TIENDA A LA GENTE DEL CAMPO Y ALGUNOS NO LE PAGARON Y POR ESO LE CANTARON EN CARNAVAL ESTE ESTRIBILLO:

"" No te fies del Serrano
ni de los trigos a la cuarta
Los trigos...se van sin granos
y ahí se queda la trampa...
José Cobalea Ramos.""

Es algo parecido a lo que me ha cantado tu padre del riquitrún. Lo importante es que se acuerda perfectamente de aquel artilugio que se llamaba riquitrún y que se demuestra que no es un invento mío.
Dile que aquí encima tengo el tarro con los tapones y me hace recordarlo a él con frecuencia.
Un abrazo
Currini