Ni siquiera sé lo que han comido a medio dia los Miercoleros, pero nos hemos “tomao” en el césped el cafelito con el tradicional piñonate jimenato.
Hemos recordado nuestra ajenda de viajes realizados juntos y nos hemos reido de lo lindo con las ocurrencias de unos y otros, hemos repasado escenas de mi blog y del Tiojimeno.
Me han contado “cosas buenas" del pueblo que yo anoto en el lóbulo frontal izquierdo de mi cerebro, donde se quedan para aflorar en el momento oportuno y reforzar la “algamaza” de algún que otro comentario mío.
Hemos estado con los niños en El Carrefour de La Línea para continuar en el “Rossy” donde hemos podido saborear el “pescaito” frito variado y los serranitos especiales que allí preparan.
Hemos terminado en casa de nuestros amigos Los Miercoleros donde hemos podido tomar el cafelito, la menta poleo y sin faltar nunca el buen trozo de Piñonate de casa de mi amigo Antonio Riquelme porque Milagros dejó de hacerlo cuando se jubiló.
Entre piñonate y sorbos de menta poleo, hemos comprado el apartamento del vecino y los hemos unido, por lo que a partir de ahora ya tienen “dos en uno” y además entre Pepe y un servidor hemos levantado lo que era terraza y le hemos puesto debajo “un mallazo” por lo que la casa parece otra, pues también entre Victoria y Yeya le han dado la “perlita” a la pared.
Con el doble apartamento nuevecito, nos hemos ido hasta Mérida y hemos visto representada en el teatro Romano la obra clásica de “Electra”, después nos hemos venido rápidamente hasta Punta Europa porque habiamos dejado a Victor David dormido y la criatura ni se ha dado cuenta de que hemos estado viendo una obra de teatro en Mérida y además cuando se despierte verá el apartamento totalmente reformado y ampliado con el de Mingo.
La magia de la mente puede conseguir cosas extrañas, bonitas y hasta hacer reir a los amigos, con lo que yo me siento inmensamente feliz.
Un abrazo queridos Miercoleros
2 comentarios:
nice blog, tell me what you think about mine...
Aún no he desayunado y se me hace la boca agua con la pinta del piñonate, la menta poleo y el cafelito.
Y con respecto a la imaginación tienes toda la razón, a veces puedes pasar un feliz momento con sólo imaginar.
Pues me voy a imaginar que voy a desayunar un poco del piñonate de la fotografía a ver como me sabe.
Buen día y besos
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