Mentiras arriesgadas…
Leyendo unas declaraciones del Presidente de la Junta Municipal de Distrito de San Pablo, me llama la facilidad que puede tener un político para mentir en público. Y digo mentir, porque dada la cantidad de veces que se le ha recordado en pleno cómo funcionan otras Juntas Municipales de Distrito más participativas, y dado que él mismo votó en contra de reglamentos alternativos, no puede alegar su ignorancia de siempre.
En concreto, una de las afirmaciones que hace es que la JMD de San Pablo es la única que cuenta con participación de las asociaciones vecinales… y puede que sea la única que recorta los derechos de las Asociaciones en esta Junta, porque otras son mucho más participativas.
No hay que irse muy lejos, pero a modo de ejemplo basta mirar el Reglamento de las Juntas Municipales de Distrito de Granada, que en su artículo 12 establece que:
“Artículo 12º.- El Pleno del Distrito estará integrado por los/las siguientes miembros:
a) El/la Presidente/a
b) Cinco vocales, que representarán a los grupos políticos municipales, preferentemente con residencia en el Distrito, y que serán nombrados por el/la Alcalde/sa a propuesta de sus respectivos grupos municipales y se distribuirán proporcionalmente a su representación en el Ayuntamiento.
c) Un vocal, representante por cada una de las Asociaciones de Vecinos reconocidas oficialmente por el Pleno del Ayuntamiento para formar parte de las mismas, y que estén domiciliadas en el distrito. Dicho/a vocal será nombrado/a por el/la Alcalde/sa a propuesta de la correspondiente Asociación de Vecinos.
d) Dos vocales, representantes de dos colectivos o sectores en que se encuadran las diferentes organizaciones ciudadanas (Asociaciones culturales, deportivas, juveniles, mayores, mujeres, recreativas, etc.,) que defiendan los intereses de los/as ciudadanos/as y que tengan domicilio social en el distrito. Serán nombrados por el/la Alcalde/sa a propuesta de las organizaciones ciudadanas representadas, previa consulta al Concejal de Participación Ciudadana y a la vista de las solicitudes presentadas por las mismas. La elección de estos vocales se efectuará mediante votación entre los mismos solicitantes, y será organizada desde el Area de Participación Ciudadana.”
Es decir, que en las Juntas Municipales de Distrito de otros municipios, al igual que en el reglamento alternativo presentado por el Partido Andalucista hace siete años, se permite la participación a todas las asociaciones, sin tener que discutir si tienen más derechos unas u otras.
En San Pablo, tal vez para conseguir mayorías donde no las hay, se quiso incluir una cláusula que recortaba el número de asociaciones y, además, dejaba al Alcalde la posibilidad de elegir cuáles si no había consenso. Pienso que esa cláusula que insertó el partido gobernante (PSOE) iba más destinada a no perder el control si otro partido lograba allí mayoría, pero tras las últimas elecciones han dejado la opción a otro partido.
El problema viene cuando por cuestiones de las reglas democráticas el PSOE podría, con el reglamento actual en la mano, tener la Presidencia de la JMD, pero no la mayoría absoluta sin la que no sabe dar un paso, salvo que consiga el apoyo firme de dos asociaciones.
Visto lo visto, la diferencia de la JMD de San Pablo del resto no es que permita la participación de las Asociaciones, si no todo lo contrario, que la limite cuando en el resto de municipios eso no tiene sentido
En concreto, una de las afirmaciones que hace es que la JMD de San Pablo es la única que cuenta con participación de las asociaciones vecinales… y puede que sea la única que recorta los derechos de las Asociaciones en esta Junta, porque otras son mucho más participativas.
No hay que irse muy lejos, pero a modo de ejemplo basta mirar el Reglamento de las Juntas Municipales de Distrito de Granada, que en su artículo 12 establece que:
“Artículo 12º.- El Pleno del Distrito estará integrado por los/las siguientes miembros:
a) El/la Presidente/a
b) Cinco vocales, que representarán a los grupos políticos municipales, preferentemente con residencia en el Distrito, y que serán nombrados por el/la Alcalde/sa a propuesta de sus respectivos grupos municipales y se distribuirán proporcionalmente a su representación en el Ayuntamiento.
c) Un vocal, representante por cada una de las Asociaciones de Vecinos reconocidas oficialmente por el Pleno del Ayuntamiento para formar parte de las mismas, y que estén domiciliadas en el distrito. Dicho/a vocal será nombrado/a por el/la Alcalde/sa a propuesta de la correspondiente Asociación de Vecinos.
d) Dos vocales, representantes de dos colectivos o sectores en que se encuadran las diferentes organizaciones ciudadanas (Asociaciones culturales, deportivas, juveniles, mayores, mujeres, recreativas, etc.,) que defiendan los intereses de los/as ciudadanos/as y que tengan domicilio social en el distrito. Serán nombrados por el/la Alcalde/sa a propuesta de las organizaciones ciudadanas representadas, previa consulta al Concejal de Participación Ciudadana y a la vista de las solicitudes presentadas por las mismas. La elección de estos vocales se efectuará mediante votación entre los mismos solicitantes, y será organizada desde el Area de Participación Ciudadana.”
Es decir, que en las Juntas Municipales de Distrito de otros municipios, al igual que en el reglamento alternativo presentado por el Partido Andalucista hace siete años, se permite la participación a todas las asociaciones, sin tener que discutir si tienen más derechos unas u otras.
En San Pablo, tal vez para conseguir mayorías donde no las hay, se quiso incluir una cláusula que recortaba el número de asociaciones y, además, dejaba al Alcalde la posibilidad de elegir cuáles si no había consenso. Pienso que esa cláusula que insertó el partido gobernante (PSOE) iba más destinada a no perder el control si otro partido lograba allí mayoría, pero tras las últimas elecciones han dejado la opción a otro partido.
El problema viene cuando por cuestiones de las reglas democráticas el PSOE podría, con el reglamento actual en la mano, tener la Presidencia de la JMD, pero no la mayoría absoluta sin la que no sabe dar un paso, salvo que consiga el apoyo firme de dos asociaciones.
Visto lo visto, la diferencia de la JMD de San Pablo del resto no es que permita la participación de las Asociaciones, si no todo lo contrario, que la limite cuando en el resto de municipios eso no tiene sentido
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