FOTO: POMPEYA ( ITALIA)
FOTO: ITÁLICA ( SANTI PONCE)Una vez derrotados los cartagineses y con el cetro del poder en la mano, Roma planta su sello del sometimiento en la Península Ibérica. Con la espada en alto nos arrancó nuestro idioma de los chaparros y los quejigos y nos regaló unas raíces lingüísticas latinas que poco a poco fuimos aprendiendo para construir nuestra propia dialéctica y no saber expresarnos ya nada más que al estilo romano.
¡Cáspita con Roma!... dejó vestigios de su ocupación hasta en mi pueblo y que me digan que no es cierto, que os llevo a Las Torres y os enseño aquella piedra con la inscripción en latín, aunque para disgusto nuestro, la colocasen los árabes al revés de cómo debiese estar para que no pudiésemos leerla. O nos vamos a la parte de detrás y vemos incrustada en la pared un capitel de columna que sin decir nada nos incita a pensar….! Leche… aquí estuvieron tambien los romanos! Y para que decirte si ahora resulta que OBA parece ser estuvo situada en el Huerto de Salvador Barranco junto al castillo y seguro que si buscamos encontramos la calzada que los llevaba hasta el rio para traer agua a la ciudad.
Lo cierto es que como dice el historiador Fernando García de Cortázar:- “ Ninguna herencia cultural será más duradera. Ni siquiera el derrumbe del imperio borrará la obra de los Césares”.
Otro recuerdo que nos dejó Roma en el pueblo son sus monedas que durante mucho tiempo utilizamos los chiquillos para jugar y los mayores para ponerlas debajo de las balanzas de los pesos con la finalidad de robar descaradamente a los clientes y las poquitas que han quedado las tendrán guardadas por si algún día toca de que sobren tres pesetas en el Ayuntamiento y nos hagan un museo, no sólo con las monedas sino tambien con la lucierna del practicante de San Pablo ( si nos la quiere dar San Roque).
Roma, no pagó traidores pero se cargó a Viriato y aprendieron el latin los lucitanos que hoy en día se llaman portugueses que son como españoles pero con otros matices en el idioma.
Si nos ponemos a pensar que en toda nuestras costas tenian ciudades como Baelo Claudia, Carteya, o Barbésula para fabricar el garum y llevárselo a que lo degustasen los potentados en la Roma del poder, te quedas boquiabierto porque habia que empedrar muchos kilómetros de calzada hasta llegar a la Ciudad Eterna y mucho que andar en carros y los guardias romanos con aquellas túnicas , aquellos gorros y el “pecho de lata”, eso cuando se hacía por tierra, pero como eran tan listos, tenían sus barcos especiales para estas cosas y lo transportaban junto con otras mercancías de valor hasta Roma y otras ciudades importantes del imperio.
Roma le quitó todo a Grecia y supo asimilar la cultura clásica para transmitírnosla íntegra a los pardillos ibéricos que sólo nos dedicábamos a coger conejos cuando llegaron por primera vez a nuestros hogares y además como poder del agua sobre las piedras nos construyeron los acueductos que hoy perduran en muchos lugares de nuestra geografía como fieles testigo de lo que estoy diciendo.
Emérita Augusta( Mérida), Itálica ( Santi Ponce) son lugares que no podemos dejar de visitar y cuando esteis allí comprobareis que no hay necesidad de ir a Roma para sentirnos como si ya formámesos parte del Imperio Romano a pesar del tiempo que ha pasado porque la fuerza que nos imprimió perdurará para siempre dentro de nosotros.
Fuimos aprendices de romanos y hasta nuestro rey visigodo Leovigildo mandó acuñar tremises de oro como proclamando el nacimiento de una nueva Roma. pero esta vez con sede en Toledo.
He querido hacer un pequeño recorrido histórico a mi manera por los caminos de Roma y como veis todavía sus piedras de calzadas sirven para que podamos transitar sin tropezar y sus enseñanzas están en nuestros libros y los hijos de nuestros hijos seguirán recibiendo la influencia de algo que perdura en la existencia porque la huella de la cultura cuesta trabajo de borrar.
Seguiremos en nuestro castillo, en nuestro pueblo, pero no olvidamos que fuimos y seguimos siendo verdaderos romanos en el tiempo.
Un abrazo.
¡Cáspita con Roma!... dejó vestigios de su ocupación hasta en mi pueblo y que me digan que no es cierto, que os llevo a Las Torres y os enseño aquella piedra con la inscripción en latín, aunque para disgusto nuestro, la colocasen los árabes al revés de cómo debiese estar para que no pudiésemos leerla. O nos vamos a la parte de detrás y vemos incrustada en la pared un capitel de columna que sin decir nada nos incita a pensar….! Leche… aquí estuvieron tambien los romanos! Y para que decirte si ahora resulta que OBA parece ser estuvo situada en el Huerto de Salvador Barranco junto al castillo y seguro que si buscamos encontramos la calzada que los llevaba hasta el rio para traer agua a la ciudad.
Lo cierto es que como dice el historiador Fernando García de Cortázar:- “ Ninguna herencia cultural será más duradera. Ni siquiera el derrumbe del imperio borrará la obra de los Césares”.
Otro recuerdo que nos dejó Roma en el pueblo son sus monedas que durante mucho tiempo utilizamos los chiquillos para jugar y los mayores para ponerlas debajo de las balanzas de los pesos con la finalidad de robar descaradamente a los clientes y las poquitas que han quedado las tendrán guardadas por si algún día toca de que sobren tres pesetas en el Ayuntamiento y nos hagan un museo, no sólo con las monedas sino tambien con la lucierna del practicante de San Pablo ( si nos la quiere dar San Roque).
Roma, no pagó traidores pero se cargó a Viriato y aprendieron el latin los lucitanos que hoy en día se llaman portugueses que son como españoles pero con otros matices en el idioma.
Si nos ponemos a pensar que en toda nuestras costas tenian ciudades como Baelo Claudia, Carteya, o Barbésula para fabricar el garum y llevárselo a que lo degustasen los potentados en la Roma del poder, te quedas boquiabierto porque habia que empedrar muchos kilómetros de calzada hasta llegar a la Ciudad Eterna y mucho que andar en carros y los guardias romanos con aquellas túnicas , aquellos gorros y el “pecho de lata”, eso cuando se hacía por tierra, pero como eran tan listos, tenían sus barcos especiales para estas cosas y lo transportaban junto con otras mercancías de valor hasta Roma y otras ciudades importantes del imperio.
Roma le quitó todo a Grecia y supo asimilar la cultura clásica para transmitírnosla íntegra a los pardillos ibéricos que sólo nos dedicábamos a coger conejos cuando llegaron por primera vez a nuestros hogares y además como poder del agua sobre las piedras nos construyeron los acueductos que hoy perduran en muchos lugares de nuestra geografía como fieles testigo de lo que estoy diciendo.
Emérita Augusta( Mérida), Itálica ( Santi Ponce) son lugares que no podemos dejar de visitar y cuando esteis allí comprobareis que no hay necesidad de ir a Roma para sentirnos como si ya formámesos parte del Imperio Romano a pesar del tiempo que ha pasado porque la fuerza que nos imprimió perdurará para siempre dentro de nosotros.
Fuimos aprendices de romanos y hasta nuestro rey visigodo Leovigildo mandó acuñar tremises de oro como proclamando el nacimiento de una nueva Roma. pero esta vez con sede en Toledo.
He querido hacer un pequeño recorrido histórico a mi manera por los caminos de Roma y como veis todavía sus piedras de calzadas sirven para que podamos transitar sin tropezar y sus enseñanzas están en nuestros libros y los hijos de nuestros hijos seguirán recibiendo la influencia de algo que perdura en la existencia porque la huella de la cultura cuesta trabajo de borrar.
Seguiremos en nuestro castillo, en nuestro pueblo, pero no olvidamos que fuimos y seguimos siendo verdaderos romanos en el tiempo.
Un abrazo.
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